Las brujas de la Vila Vella

Tossa, cuadro Marines de Blanco Grané con barca. Referencia las brujas de Tossa

Las brujas de la Vila Vella

Una de las leyendas más fascinantes de Tossa de Mar es la de las brujas que rondaban la Vila Vella, el viejo casco medieval de la ciudad. Se cuenta que, en tiempos remotos, había un pescador que vivía felizmente en el pequeño pueblo. Tenía una barca muy bonita, que mantenía con mucho cuidado, y la atracaba cada día en la tranquila cala de Es Codolar. Salía cada mañana al mar, donde se ganaba la vida, y sentía que su trabajo y su barca le proporcionaban la paz que tanto deseaba.

Sin embargo, un día, algo extraño ocurrió. Al regresar después de una jornada de pesca, el pescador encontró la barca desordenada, los remos tirados por el suelo, y todo en un estado que no podía explicar. Extrañado, pensó:

– ¿Qué ha pasado aquí? Tal vez sean los niños del pueblo que se divierten… No le daré más importancia.

Pero los días pasaron, y lo mismo ocurrió cada sábado por la mañana: su barca estaba revuelta, como si alguien hubiera estado jugando con ella durante la noche. Ya algo preocupado, el pescador decidió que iba a averiguar qué estaba sucediendo.

Así que, al llegar el siguiente sábado, esperó hasta la noche y se ocultó en el pequeño armario de proa de su barca, decidido a no perderse lo que estaba ocurriendo. A medida que el reloj de la Torre de las Horas marcaba la medianoche, empezó a escuchar unos pasos suaves. Tres mujeres, vestidas con ropas oscuras, saltaron dentro de la barca. Una de ellas, la más joven, tomó los remos y dijo:

– ¡Bota por uno! ¡Bota por dos! ¡Bota por tres!

Pero la barca no se movía. La mujer más vieja, que parecía ser la líder, miró a las otras y preguntó:

– ¿Alguna de vosotras espera un hijo?

Las otras dos mujeres respondieron, confundidas:

– Que nosotras sepamos, no.

La mujer mayor asintió, y, con un aire de impaciencia, les ordenó:

– ¡Probemos de nuevo! ¡Bota por uno! ¡Bota por dos! ¡Bota por tres!… ¡y bota por cuatro!

De repente, la barca se movió con un fuerte zas y comenzó a deslizarse sobre el agua. Con cada golpe de remo, avanzaban más y más, y, a medida que recorrían el mar, el pescador sintió un frío escalofrío recorrerle la espalda. La barca avanzaba milla tras milla, hasta que, tras varias horas, llegaron a una playa desierta llena de palmeras. Allí, las tres mujeres saltaron de la barca y, ante los ojos del pescador, se convirtieron en tres gatos negros de mirada penetrante.

El pescador permaneció oculto, temeroso de ser descubierto, y esperó a que las criaturas regresaran. Pasadas unas horas, vio cómo los tres gatos negros regresaban a la barca y, tras un parpadeo, se transformaron de nuevo en mujeres. La más vieja, con voz autoritaria, volvió a ordenar:

– ¡Bota por uno! ¡Bota por dos! ¡Bota por tres! ¡Bota por cuatro!

Con otro estruendoso zas, la barca emprendió el regreso. Esta vez, el pescador podía ver cómo, mientras la barca avanzaba por el mar, el cielo comenzaba a clarear. Antes de que el amanecer llegara a la costa de Tossa, ya estaban de vuelta, en la misma cala de Es Codolar. Las mujeres, al saltar de la barca, dejaron todo desordenado y revuelto, tal como lo habían hecho antes.

El pescador esperó a que se marcharan y, temblando de miedo, salió de su escondite. Fue rápidamente a ver al párroco del pueblo, quien, al escuchar la increíble historia, le dijo:

– Esto tiene fácil solución, hijo mío.

El pescador y el párroco se dirigieron al mar con un hisopo, agua bendita y un libro santo. Con firmeza, el párroco hizo unas bendiciones y roció la barca con el agua bendita, mientras recitaba algunas oraciones. Desde ese día, las brujas nunca volvieron a acercarse a la barca, y la calma regresó a la vida del pescador.

La barca, que siempre había sido su posesión más querida, permaneció en su lugar sin alterarse, como si nada hubiera ocurrido. Y así, la leyenda de las brujas de la Vila Vella se fue transmitiendo de generación en generación, como un recordatorio de que, a veces, lo que parece un simple enredo de la vida cotidiana puede estar vinculado a misterios mucho más antiguos y oscuros de los que ni siquiera imaginamos.

La historia, hoy en día, sigue viva en las voces de quienes conocen el misterio y la magia de Tossa de Mar, un lugar donde la realidad y la leyenda se entrelazan a cada paso.

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